Texto y edición por Andrés Sánchez Belzunces
El Leash es un elemento de seguridad que pasa desapercibido muchas veces cuando hablamos de material de Surf. Pero su importancia es muy grande, él nos permite mantenernos en contacto con nuestra tabla, recuperarla tras un revolcón o caída y asi tener siempre un elemento de flotación a mano, no golpear a los demás surfistas o bañistas con ella si se separa demasiado de nosotros y ahorrarnos las cansadas sesiones de natación hasta la orilla en busca de la tabla.
Popularizado por Pat O´neill en California allá por 1971, harto de tener que nadar siempre para recuperar la tabla, nació como un elemento de comodidad para el surfer. Hasta aquel entonces, el gran tamaño de las tablas de surf, junto con su peso, obligaba que los surfers estuvieran muy entrenados dentro del agua por lo general. Y limitaba el numero de olas por sesión al pasar nadando mucho tiempo. Por no hablar de la seguridad en caso de corrientes, mareos, cansancio, golpes, etc
Como vemos, ese pequeño invento (como le llamarón los surfers españoles de los setenta cuando apareció en nuestro país) es de crucial importancia para un surf seguro para nosotros y los demás surfistas. Conocer los leash bien, elegir el más adecuado y saber cuidarlo es fundamental.
Hoy en dia, con la inclusión del uretano y del velcro como materias primas en la fabricación de los inventos, se ha convertido en un elemento de seguridad asequible y funcional, con una amplia gama de modelos y utilidades.
Veamos sus principales aspectos:
1.- La vida útil de un Leash es relativamente corta. Los tirones continuos afectan a la duración el invento: la sal, el sol, la constante humedad… También lo deterioran y hacen que la vida del invento se acorte. La costumbre de enrollarlo en las quillas, provocando dobleces e incluso algún corte en el mismo, puede resultar perjudicial y terminar deformándolo o producirle rasgaduras que lleven a que rompa. Cambiar de invento cada año, dos a lo sumo si se usa a menudo es lo ideal. Y revisarlo periódicamente para comprobar su buen estado, lavarlo con agua dulce y no exponerlo demasiado al sol, también supone una ayuda a su vida útil.
2.- Longitudes. La longitud adecuada del leash respecto a la tabla nos proporciona seguridad y evita accidentes y mal uso. Por lo general el leash suele ser algo mas largo que la tabla. De esa manera obtenemos la distancia justa al perderla para que se separe de nosotros y evitar así que nos golpee en el revolcón; Y también para que podamos recuperar la tabla rápido y continuar remando. Curiosamente los surfistas de olas gigantes prefieren un invento mas corto y fino por motivos de seguridad, pues ante una ola monstruosa prefieren liberarse de la tabla y que el leash rompa antes, como nos explicaba el Big Wave Rider Axi Muniain.
Para un longboard se usan con un mayor margen de tamaño para poder caminar hasta la punta y darnos una distancia mas grande de separación y seguridad al perder el tablón.
3.- Grosor. A mayor tamaño de ola, mayor grosor de invento (entorno a los 8 mm). Si por el contrario, lo tuyo son las olas de verano, con uno de 5 mm te va a sobrar. Si tu tabla va justa de litros, es fina, flota poco y tiene escaso volumen, un invento mas delgado ofrecerá menor resistencia en el agua aunque será mas fragil.
4.- Formas. Los hay tradicionales, y también de tipo teléfono o enrollados. Los de teléfono acostumbran a usarse en la practica del bodyboard.
5.- Colores. A mas oscuro, mayor deterioro con el sol. Pero el color negro es el más usado. Hoy en día encontrarás todas las opciones imaginables, Tu eliges!
6.- Quitavueltas. Un buen leash se distingue por llevar doble quitavueltas, uno a cada lado del invento. Se trata de un dispositivo que permite al leash y la tabla girar en sentidos contrarios sin que eso enrolle el invento. Es fundamental para no terminar la sesión de surf con las piernas trabadas por el invento.
7.- Tobillo o rodilla. Lo normal es que se aten al tobillo de la pierna que cada uno de nosotros lleva atras en la tabla; Ya seamos regular o goofy. Los de debajo de la rodilla se usan en el surf de Longboard, permitiendo mas libertad a la hora de caminar sobre la tabla y no enrollandose con los pies.
8.- Bolsillo. Casi todos los inventos traen un bolsillo para guardar la llave del coche, parafina, una pequeña navaja (por si te enredas con un arte de pesca.) O cualquier otro objeto que consideres necesario.
9.- Guardacantos. En el inicio del leash veras una superficie plana antes de comenzar la “cuerda” en si. Es el guardacantos, encargado de proteger el tail o cola de nuestra tabla en caso de caída y tirón. Debemos asegurarnos al colocarlo por primera vez de que la cuerda que une el leash al tapón de la tabla no es demasiado larga y hace que él guardacantos quede sin contacto con el tail; Pues ello provoca cortes y roturas a la cola de la tabla.
10.- Ten siempre dos a mano. En caso de rotura, tener otro leash de repuesto nos salva la sesión.Más en caso de viaje a olas fuera de casa. Y de la cuerda que lo une al tapón, siempre bien cuidada y limpia, tampoco está demás tener un repuesto por si caso.
Surf seguro es surf divertido!