Foto: Pablo Martínez @Polyya
Cuando llegas a Laredo por la autopista gratuita del cantábrico, la A-8, desde Bilbao, lo primero que distingues al ver el pueblo es una gran línea de altos bloques de apartamentos veraniegos orillados a una extensa lengua de arena de 5 kilómetros entre las marismas de Santoña y el mar Cantábrico. Por su orientación, Laredo, cuyas previsiones de olas actualizadas todos los días tenéis aquí, recibe bien los vientos “gallegos” del oeste tan comunes en los meses fríos, y aguanta las marejadas que desfasan en otros spots, dando olas con terral, mas pequeñas y ordenadas cuando fuera está todo enorme y ventado.
Por ello Laredo ha sido desde hace décadas refugio de surfistas vascos y cántabros en los meses de invierno, una de las opciones que salva la sesión cuando hay gallego fuerte y maretón. Y por ello también, allí se celebra La Invernal, un evento que trae desde hace 3 años a lo mejor del surf nacional a competir en sus olas, y que en esta 3ª edición han ganado Ariane Ochoa y Vicente Romero, seguido en categoría masculina del vasco Eneko Acero, el vasco-francés Andy Criere, que se estrenaba en la clásica del invierno y del cántabro Pablo Gutiérrez. En féminas acompañaron a Ariane al podio Alejandra García, Janire González-Etxebarri y de una de las favoritas y ganadora de la pasada edición, Garazi Sánchez.