Los surfers Dillon Perillo, Brett Barley y Mike Gleason han seguido las pisadas de Darwin y de Kepa para terminar también en Galápagos. Las 16 de horas de vuelo para llegar a San Cristóbal se conviertieron en una Odisea: pérdida de equipajes y tablas,olas desaparecidas, cara a caras con lagartos gigantes y tiburones…pero con un golpe final de suerte: los chicos pudieron agarrar una de las 10 barcas que salían de la isla para buscar a El Niño.