Aritz Aranburu se ha proclamado vencedor de la primera edición de “Mundaka Tubes”, un campeonato abierto a todo el mundo y cuyo objetivo es el de premiar el mejor tubo registrado por una videocámara.
El jurado -compuesto por dos miembros del ayuntamiento de Mundaka, dos miembros del Mundakako surf taldea y otros dos representantes de la marca Billabong- ha dado a conocer su veredicto este mediodía. El objetivo era elegir el mejor tubo grabado entre el 1 de diciembre de 2011 y el 13 de enero de este mismo año en la mítica ola vizcaína. Como ya adelantábamos, el premio ha ido a manos de Aritz Aranburu. Iker Fuentes y Txaber Trojaola también han sido premiados con el segundo y tercer puesto respectivamente.
El campeonato-concurso premiaba tanto la labor de los surfistas como la de los cámaras. Y es que el requisito indispensable era que las olas quedasen registradas en un vídeo de no más de un minuto de duración. Así pues tanto el surfista como el cámara tenían premio. En ese sentido, Aritz Aranburu se ha llevado un premio de 6.000€ mientras que su cámara, Isio Noya García, se ha hecho con 1.500€.
Mundaka Tubes también tenía un premio especial del público. En dicho apartado el vencedor ha sido Txaber Trojaola. El surfista vizcaíno también se lleva el wildcard o invitación para el Billabong Mundaka Challenge, campeonato que se espera celebrar este año en Mundaka y que contará con la presencia de algunos de los mejores surfistas del mundo, Aritz Aranburu entre ellos.
Aritz Aranburu se ha mostrado “feliz por el gran gustazo que supone llevarse un premio por pegarse unos tubazo en Mundaka”, la que para él es “su ola favorita”. El zarauztarra ha querido dar las gracias “a todos los patrocinadores que han hecho posible un evento tan original como divertido”. Aritz también ha tenido palabras de agradecimiento para “todas las personas que votaron por él a través de la página web”. El zarauztarra ha querido cerrar con unas palabras de agradecimiento a Isio Noya, cámara y editor de todos sus vídeos. Aritz ha dado “un millón de gracias a Isio por estar siempre ahí, al pie del cañón”. El zarauztarra bromeaba diciendo que “deberían hacer una estatua de Isio en las rocas de Mundaka”, lugar en el que pasa tantas horas tomando imágenes.