Las lecciones sobre dietas y nutrición deben de ser una formación continua para conocer qué comemos y qué nos alimenta. Hoy os traemos unos primeros consejos para abrir camino por el extenso campo de la nutrición del deportista y en especial del surfista, y así conseguir niveles óptimos de energía durante sesiones de hasta 4 horas non-stop.
1. Come alimentos enteros: frutas, verduras, grasas naturales y proteínas. Si todavía no has sacado de tu dieta la comida procesada y los azúcares es hora de empezar.
2. Bebe agua pura y mantente hidratado: las gaseosas, bebidas” para deportistas” y otras bebidas artificialmente saborizadas no aportan nutrientes naturales para mantenerte sano. Si buscas una buena bebida rehidratante escurre un limón, lima o naranja en agua pura y añade una pizca de sal.
3. Sigue una dieta equilibrada: que tu menú diario incluya proteínas, carbohidratos y grasas saludables en cada comida.
4. Si no puedes olvidarte del alcohol, procura no darle todos los días de la semana.
5. Después del surf, repón las reservas de glucógeno de tus músculos.
6.Reduce la ingesta de harinas blancas y procesadas. Apuesta por lo integral, la harina de quinoa , de avena, de almendra y otras variantes de las que posiblemente no habías ni oído hablar.
7.Compra en el mercado, fresco y orgánico: Si tu bolsillo te lo permite apoya el consumo local con la compra de alimentos libres de pesticidas y más saludables. Además, el dedicar tiempo a tu alimentación, conocer los mercados y el proceso de principio a fin de tu alimentación te reportará enormes beneficios en tu salud física y mental.
8. No olvides el desayuno: antes de surfear, come una pieza de fruta y algunas nueces o cualquier tipo de pequeño tentempié . Surfear con el estómago lleno puede resultar incómodo, pero con un ligero desayuno puedes conseguir el combustible necesario para la sesión. En días de poco surf prepara un desayuno rico en proteínas, fruta o verduras y grasas saludables. Reduce el consumo de pan y cereales con un bajo valor nutricional.
9. Come grasas saludables y reduce el consumo de aceites vegetales procesados: las grasas buenas y aceites saludables son el de oliva, aguacates, aceite de coco, las nueces o el “ghee”(muy usado en la comida india). Las grasas saludables son importantes para el sistema nervioso, la asunción de vitaminas en sangre, control hormonal, sistema inmune y la salud en general.
10. Aprende a cocinar; aunque suene estúpido, el cocinar tus propios alimentos (además de poder ayudarte a ligar más) puede tener un gran impacto en tu salud. Cambiando tu relación con la comida y dejando a un lado la comida rápida reconocerás qué estás comiendo y que nutrientes te estás aportando.
Esta lista es, como hemos dicho, tan solo una pequeña base para empezar a entender cómo debemos formar nuestro menú. Una buena alimentación no es solo saciar el hambre, sino cambiar nuestra forma de vida para sentirnos más energéticos y atractivos por fuera y más estables y tranquilos por dentro. Si solo encontramos ventajas, ¿para qué esperar?