El ejemplo y entusiasmo de Gwyn Haslock es maravilloso. Contagiada por la energía del océano y las olas, esta entrañable abuelita tiene una fuerza positiva contagiosa. Desde que comenzó a surfear en Gran Bretaña, pionera de aquellas costas, y se convirtiese en la primera campeona femenina del país, han pasado muchos años, y sin dejar de surfear siempre que puede.
60 años después de su primer surf, Gwyn y su admirable vida nos traen todo los que necesitamos para dar un impulso y una sonrisa a nuestro surf, hallamos empezado a practicarlo o lo estemos pensando.
Como explicábamos en este otro artículo ¡No hay edad para el Surf!