Somos unos locos por el surf (incluso más que los pingüinos de Sony) lo sabemos, pero la Península, y más concretamente el Mediterráneo no es el paraíso ideal de la abundancia de olas, por ello, cuando aparece un buen swell, debemos estar 100% preparados para disfrutar del día y solo dejar de surfear por falta de luz, y no por falta de fuerza en las brazadas. Nuestro objetivo es estar en forma y con este ESPECIAL de Deportes Complementarios al surf en ausencia de olas podemos lograr un entrenamiento completo y perfecto para mantenernos frescos cuando suene la alarma de olas.
En el capítulo de hoy hablaremos del piragüismo como entrenamiento perfecto para mantener en forma nuestra remada. En los siguientes capítulos traeremos entrenamientos de deportes centrados en mejorar el equilibrio, la apnea y el manejo de la tabla… ¡ Hazte con todos!
EL PIRAGÜISMO
Para empezar,lo básico es hacerse con una canoa, bien comprada, bien alquilada.Existen infinidad de centros de piragüismo, kayak y canoas más cerca de casa de lo que pensamos. La canoa exige tener buenas habilidades de nado, pero por estas alturas suponemos que la mayoría de surfistas las tienen. Aunque no sea un sustituto para saber nadar, siempre se debe tener puesto un chaleco salvavidas. Antes de poner la canoa en el agua, se debería practicar algunos golpes de remo en una piscina (poniéndose de rodillas y remando en el agua). Esto permitirá concentrarse en estos movimientos de remo en lugar de la canoa o embarcación similar. También tenemos que tener en cuenta que podemos remar con otras personas en tandem, por lo que es buena idea practicar esta forma conjunta de hacer piragüismo. Es una buena práctica realizar los ejercicios en ambos lados de la embarcación, porque no solo nos haremos unos remeros más fuertes, sino que nos adaptaremos mejor a las diferentes posiciones al remar.
Dependiendo de la distancia del vehículo donde llevamos la canoa y el agua, se puede transportar la canoa de varias maneras. El método más común es cargarla a peso llevando los remos en los lados opuestos a cada extremo de la canoa y sosteniendo en peso la embarcación.Colocada la canoa en el agua, los dos ocupantes irán al centro de la embarcación cada una en el lado opuesto de manera que queden enfrentados al subirse. Se debe extender los brazos y coger la canoa cada uno por su lado flexionando las rodillas un poco. Un salto estable , y arriba. Si ves que esto no funciona, olvídalo todo y busca tu manera segura y exitosa de lograrlo. Para un autodidacta como lo han sido la mayoría de surfistas, las instrucciones detalladas y excesivamente específicas no suelen funcionar. La mayoría de surfers practican más el Juan Palomo, yo me lo guiso yo me lo como. Pero no hay que olvidar mantener el centro de gravedad para subirse a ella.
Si estamos usando la canoa en la playa,una vez que el agua nos llegue por encima de las rodillas, podemos entrar en la canoa. Aunque hacer piragüismo es algo realmente gratificante tanto física como mentalmente, puede también ser peligroso en ciertas condiciones y hay que tomar ciertas precauciones para evitar problemas. Si vuelcas, sujétate a la canoa pase lo que pase. Es también una forma de salvavidas y te mantendrá a flote indefinidamente. Nunca se debe dejar la canoa para nadar a la orilla si se está muy lejos.Lo mismo ocurre con la tabla de surf.
Para volver a subirte a la canoa, hay que ir al centro ya que es la parte que ofrece mayor estabilidad. Agárrate al agarradero más próximo que tengas disponible y pon las piernas en una posición horizontal en el agua. Entonces hay que empujar hacia abajo el agarradero que tienes cogido e intenta coger el del otro lado. Hay que mantener el codo alzado y girar con el movimiento de la canoa hasta que caigamos dentro. Si se pierde el remo, podemos hacerlo con el brazo.No resulta complicado viniendo del surf, donde las zambullidas y revolcones son una constante, sin embargo la canoa es más aparatosa y si un golpe con la tabla resulta doloroso, imagina un “piragüazo” en la cabeza.
La rutina en piragüa/kayak/canoa te mantendrá más en forma de lo que piensas, ya que la remada es el movimiento constante en el deporte y acabarás desarrollando una gran musculatura del tren superior. En primer lugar los músculos más implicados son los de los brazos, en concreto los bíceps y los tríceps que trabajan de manera directa, aunque indirectamente tocaremos los antebrazos y los hombros que nos servirán para dar impulso al remo a la hora de desplazarnos con la piragua por el agua. Pero la cosa no se queda solo ahí, sino que el trabajo de los pectorales, que se contraen cada vez que remamos es algo patente que no podemos pasar por alto y que nos ayudará a mantenerlos tonificados y en tensión.
La parte dorsal tampoco se queda exenta del trabajo que realizamos a la hora de remar, pues el movimiento que describimos con el remo implica un giro que pone a trabajar a la parte delantera del tronco y a la trasera al lanzar el remo hacia delante y hacia atrás para expulsar el agua y volver a meter en remo en el agua e impulsarnos de nuevo. Junto a todo esto no podemos olvidar el importante trabajo abdominal que vamos a realizar, pues durante todo el tiempo que dura la actividad los mantenemos contraídos.
Si con el paso del tiempo, vas convirtiéndote en un yonki de los kayaks, hasta el punto de olvidar de donde vienes y que eres hijo del surf, prueba con el surf kayaking, tremendamente divertido y genial para olas no excesivamente grandes.
When SURF meets KAYAK from RiverElements on Vimeo.
Cuando la sequía de olas apriete, hazte con un kayak, y si consigues a unos amigos las risas estarán 100% aseguradas.¡Disfruta hasta que vuelva a bombear el mar!
Buena sesión de kayak, mucho entrenamiento y ¡feliz surf!